La Filosofía es sobre todo un pensamiento vivo porque consiste en gran medida en el arte de cuestionar; de allí que atreverse a pensar, a interpelar verdades oficiales y descubrir sobre qué intereses se han construido y qué esconden es nuestra mejor defensa a la hora de enfrentarnos ante la arrolladora influencia de los medios y las redes sociales que difunden ideas y pensamientos no siempre ciertos, en su permanente intento de fortalecer un predominio discursivo que reproduce formas de poder político de dominación que explota el miedo y la vulnerabilidad social de un pueblo. Aventurarse a filosofar, a pensar es vital y necesario en estos tiempos de “diálogo” porque nos ubica en el contexto histórico y social ante los problemas que enfrentamos, verlos sin tapujos, reflexionar sobre ellos y construir los senderos para abordarlos y poder superarlos más allá de opiniones, creencias y prejuicios personales y, por supuesto, más allá de las promesas y del marketing electoral en el que pronto nos veremos sumidos. Como señala Elsa González: “Filosofar para posibilitar el ejercicio de un pensamiento crítico que es capaz de evaluar y analizar consistentemente la realidad de la que se trate y que pueda mostrar que las cosas y problemas pueden verse y resolverse de otra manera”. (O)
CMV
Licenciada en Ciencias de la Información y Comunicación Social y Diplomado en Medio Impresos Experiencia como periodista y editora de suplementos. Es editora digital.
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