La falta de una consulta previa fue el argumento que el Juez consideró para resolver la suspensión de la concesión minera del proyecto Loma Larga, también conocido como Quimsacocha. Este es el segundo dictamen que se recibe sobre proyectos mineros en la provincia. Resultado de un importante esfuerzo del activismo ecológico que ha encontrado eco en la ciudadanía. Tanto con la consulta popular de Girón, como con la consulta similar en Cuenca, la población decidió por amplia mayoría que no se realicen actividades mineras en lugares de recarga hídrica. Esta voluntad expresa de la ciudadanía coincide con la disposición que las poblaciones involucradas en estos proyectos deban ser consultadas previamente sobre su ejecución. A criterio del juez, esto no sucedió en la zona de impacto del proyecto Loma Larga, razón por cual está suspendido.
Si bien esta decisión ha recibido acogida, porque significa una segunda victoria para este importante sector activista y ecológico, también genera preocupación por la imagen de inseguridad jurídica que deja, así como por las pérdidas y desincentivos para la inversión extranjera. Por otro lado, los estudios han sido claros en identificar la presencia de oro, plata y cobre. Esta suspensión y posible retiro de la empresa concesionaria podría dejar el territorio a expensas de la minería ilegal con las terribles consecuencias ecológicas y humanas que se pueden presentar.
Es muy difícil conciliar a todas las partes interesadas en el desarrollo y en la protección ambiental. Está claro que para los habitantes de Cuenca y las regiones directamente involucradas con las zonas de concesión hay una preocupación por el riesgo ambiental que cualquier intervención, sea esta agrícola, humana o minera, pueda causar a un ecosistema tan sensible. Pero también es evidente que ante tanta necesidad en salud, educación, empleo, vivienda, conectividad, entre otros aspectos, las poblaciones podrían haberse beneficiado si estas intervenciones se ejecutaba con los cuidados y el empleo tecnológico apropiado para reducir al máximo el impacto ambiental. Precisamente por eso es que la consulta previa reviste de tanta importancia. Porque es la población, como primera afectada o principal beneficiada, la que debió ser tomada en cuenta.
