Moscú (EFE).- El presidente ruso, Vladímir Putin, firmó hoy una ley que estipula que los extranjeros que sirven en el ejército ruso pueden solicitar la ciudadanía rusa sin presentar un permiso de residencia.
Los extranjeros que hayan firmado un contrato con las Fuerzas Armadas de Rusia por al menos un año son elegibles para este procedimiento, según las enmiendas a la ley «sobre ciudadanía de la Federación Rusa».
Los militares extranjeros contratados están exentos de tener que vivir durante cinco años en Rusia después de obtener un permiso de residencia antes de solicitar la ciudadanía, según la agencia oficial TASS.
Putin ha firmado la ley pocos días después de decretar una movilización parcial para enviar a unos 300.000 reservistas a combatir a Ucrania.
Estrechos socios de Rusia en la postsoviética alianza militar Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC), como Kirguistán y Tayikistán, y fuera de ella, como Uzbekistán, emitieron advertencias a sus conciudadanos en Rusia para alertarles en contra la tentación de alistarse a cambio de la ciudadanía rusa.
La Embajada de Kirguistán en Moscú recordó al más de un millón de ciudadanos en Rusia que la participación en conflictos armados o acciones militares en el territorio de estados extranjeros prevé «una responsabilidad penal».
La legación tayika emitió hoy una advertencia similar y la fiscalía general uzbeka sostuvo que participar en una operación militar de otro país acarrearía entre 3 y 10 años de cárcel. EFE
Putin firma una ley que endurece penas por deserción y rendición de militares
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, también firmó hoy la ley que enmienda el Código Penal para endurecer las penas por la deserción, el saqueo y la rendición voluntaria de militares en tiempos de guerra, delitos que pueden ser condenados con hasta 15años de cárcel.
La ley establece penas de entre cinco y 15 años de cárcel según los diferentes grados de deserción y de duración, según el documento publicado en el portal de información legal de la Administración.
Según la agencia oficial TASS, el artículo 333 del Código Penal de Rusia se complementa con una tercera parte, según la cual «la ausencia del lugar de servicio sin permiso, la deserción con armas, así como la deserción de un grupo durante la movilización o la ley marcial, en tiempo de guerra o en las condiciones de un conflicto armado será sancionado con pena privativa de libertad de cinco años o hasta de quince años».
Además, de acuerdo con las enmiendas, por abandonar el lugar de servicio sin autorización, no presentarse a tiempo sin una buena razón por más de dos días (pero no más de diez) durante el período de movilización o ley marcial, el castigo es de hasta cinco años de prisión.
Si la falta de comparecencia en tales condiciones excede de diez días (pero no más de un mes), la pena será de hasta siete años de prisión. Si un militar se ausenta por más de un mes, puede ser encarcelado por un período de cinco a diez años.
Además, si un militar elude sus funciones fingiendo enfermedad, automutilándose, falsificando documentos u otros engaños en las condiciones de movilización puede ser condenado a entre cinco y 10 años de prisión.
La ley recoge además que quienes se rindan voluntariamente al enemigo enfrentarán una pena de prisión de entre tres y diez años.
Sin embargo, una primera infracción puede quedar exenta de responsabilidad penal siempre que el soldado haya tomado medidas para su liberación, haya regresado a su unidad o lugar de destino y no haya cometido ningún otro delito durante su cautiverio.
Otras enmiendas prevén la introducción de la responsabilidad penal por saqueo durante un conflicto militar o en tiempo de guerra con una pena máxima de hasta 15 años de prisión.
La ley complementa el Código Penal de la Federación Rusa con un nuevo artículo 356.1 «Saqueo». Tal acto sin circunstancias agravantes será sancionado hasta con seis años. El saqueo cometido con uso de violencia no peligrosa para la vida o la salud, o con amenaza de tal violencia, será sancionado con pena de prisión de hasta diez años.
Según la nueva ley, el saqueo cometido por un grupo de personas por acuerdo previo, en gran escala, o con el uso de violencia peligrosa para la vida o la salud, o con la amenaza de tal violencia, será castigado con pena de prisión de tres a doce años.
El castigo más severo -prisión de ocho a quince años- está previsto para los saqueos cometidos por un grupo organizado, en una escala especialmente grande, así como combinados con amenazas de asesinato o daños corporales graves a la víctima.
Por incumplimiento de la orden del comandante en tiempos de guerra y por la negativa de un soldado a participar en las hostilidades, se establece un castigo de hasta tres años de prisión y, en caso de consecuencias graves, hasta 10 años. EFE