En los meses de las grandes lluvias cuando incluso era posible ver “las columnas que sostienen el cielo” nuestra laguna, la de Cochapamba Grande en la parroquia El Valle, se llenaba de trinos, de patos y garzas, y esas blancas garzas migrantes, puntuales cada año, que añoraba mi hermano Rubén desde cualquier rincón del mundo …





