Erase un martes, 24 de junio de 1958, cuando tuvo lugar un inusual hecho, que marcó en la historia de la religiosidad de la gente que vivía en aquella época. Servía en la Ciudad de Cañar, el sacerdote P. Manuel Andrade Ochoa. En aquel día, el cura citado, luego de una misa, exhibe la sagrada …











