José Përalta decía “Llevan a Dios en los labios (muchos católicos), y su pecho es fragua de iniquidades; ostentan la cruz por divisa y ponen asechanzas a la virtud, y maldicen al hermano, y se gozan en la ajena desventura, y se hartan de pecados sin remordimientos ni zozobras (…) recitan preces sin descanso, pero …











