Una cola monstruosa había empezado a las 5,30 am. como una gran lombriz de sinuosas contorciones. Empezaba en pequeña y única ventanilla para turnos de laboratorio y en obligadas contracciones cambiaba su cuerpo adaptándose a pasillos y áreas del hospital, terminando en el mismo parqueo, fuera del edificio, donde tomé mi lugar y luego se …











