Erase medio siglo XX, cuando vimos la luz en una ciudad pequeña que crecía lentamente con pausas, cariño y tesonero trabajo de sus hijos, siempre distante del poder central, aislada por carencia de vialidad y distanciada casi de todo y de todos, el gran pretexto: el nudo del Azuay. Había paz en las calles, pocos …











