Cumplió 95 años, y desde esa distancia temporal, podemos mirar y admirar su legado al arte cuencano. Su inseparable compañera, la acuarela, está presente en un elevado número de cuadros en los que luce su espíritu profundo, tierno, sutil, hermanado con el entorno físico y humano en el que ha fluido su vida. Su obra …











