Se fueron para México, a cantar mariachis con Patiño, el itinirante Ochoa y los amigos del foro de Sao Paulo. Al fin lo hicieron aprovechando el respeto de la actual Cancillería al Derecho Internacional, y a los países que conceden asilo a quienes hacen malabares para hacerse pasar por perseguidos políticos, o simplemente están convencidos …

