Hace poco más de un mes, las cárceles del sandinismo abrieron sus mazmorras para desterrar a 222 presos políticos. Desconcertados por la sorpresiva excarcelación y mientras volaban a Washington, fueron expoliados de su nacionalidad, aterrizando apátridas. Lo más insultante de los dictadores izquierdistas es que emanan un aire de superioridad moral. Sin embargo, hacen lo …









