El Ecuador no podía rezagarse de repúblicas Latinoamericanas hermanas que van sufriendo en seguidilla la ignominia y violencia del narcoterrorismo. Una a una, desde los tupamaros a las maras centroamericanas, con hincapié en Colombia de Escobar y Méjico del Chapo, sufrieron los horrores de cobardes atentados y sicariatos perfectamente estudiados, pagados y fomentados por cabecillas …









