Si roban, roben bien. Justifiquen bien, compañeros. Así arengaba en días pasados a sus seguidores una amazónica legisladora que, acto seguido, ayudó a gritar “que el pueblo unido jamás será vencido”. El intento de explicar ese dislate embarró más las cosas al decir que esas frases se debían a que la oradora era quichua …










