“No estén tristes, no merezco ni la más mínima de sus lágrimas. Si por mí han de hacer algo, les pido que continúen el legado de felicidad, honestidad y trabajo que inicié siendo hombre y que ahora emprendo desde la sagrada altura de lo divino”. AUNQUE ESTOY DESCANSANDO, SOY LA PUERTA DEL SOL EN EL …






