Tenemos. Debemos aceptar determinadas cosas y circunstancias en las que no somos suficientes para lograr resultados positivos, que determinen un mejor pasar como estado y ciudadanos. Los falsos nacionalismos que levantan su grito aireado para defender el Ecuador y que satanizan apoyos internacionales como bases extranjeras de control de la delincuencia más astuta, es en el momento la discusión. La Asamblea, con mayoría de votos, acaba de posibilitar que la Constitución, aquella sesgada y tramposa de Montecristi, acunada en nacionalismos falsos que ayudan al crimen y el narco negocio de una manera camuflada y hábil, pueda ser modificada mediante referéndum.
Grandes potencias, empezando por EEUU no pueden erradicar el mal del momento que es la droga, que termina con millones de su gente en el más abyecto deterioro físico y mental y uno de los puntos que no pueden controlar es la enorme producción de droga en Sudamérica y que con los más brillantes ardides, es introducida para el consumo enorme que degrada la sociedad norteamericana.
No debemos ser ilusos tampoco y creer que los gringos por solo ser buena gente, gasten fantásticas sumas de impuestos de su pueblo, en bases militares extranjeras. Con ellas controlan su posición geopolítica y de defensa y se aseguran de controlar al productor de droga, dentro de lo posible, evitando que la droga llegue a ellos, cosa que logran en un discreto porcentaje, pues la astucia de estos “fitos, tigerones, choneros” etc son enormes, sin embargo, hoy acaban de ir a la cárcel una decena de familiares de fito, jorga que formaba una red de comercialización y lavado de activos muy bien organizada y efectiva. Esto no se podía dar jamás en el tiempo de hegemonía de la pandilla correísta y habrá que sospechar que gran parte de la droga embarcada a Europa, cala en Bélgica. ¿Será adivinanza?
Esta resolución pasará a la Corte Constitucional que no tiene por qué vetarla y luego a una consulta al pueblo, que con seguridad dará el visto bueno para que regresen las bases extranjeras que ayuden a nuestro país y que atrapen como en mosquetera, a los delincuentes que se enriquecieron a nuestra costilla y dolor por diez largos años.
Vamos bien. Existen claros pasos de nuestro joven presidente muy bien asesorado que me parecen positivos y sin aspavientos les va arrinconando a los delincuentes que, si sigue así, caerán para que sean largos, muy largos años, de cómodos huéspedes de la roca. (O)