
Caminando por sus calles se percibe ese aroma de pan recién salido del horno de leña, se observan las casas patrimoniales en buenas condiciones y su iglesia con la imagen del Señor de los Milagros. La gente resulta muy amable, atenta para demostrar que Nulti es un tesoro de atractivos en medio de la ruralidad cuencana.
Para llegar a su cabecera parroquial existe una vía principal de asfalto que inicia en la autopista, a la altura del redondel de Ucubamba. La carretera pasa por la feria de autos, la unidad educativa Verbo, y por varios terrenos y predios dedicados a la agricultura y ganadería.
El pan es parte de su identidad
Las panaderías son su fuerte porque preparan un pan diferente reconocido entre todos los cuencanos. Las casas tienen hornos de leña para elaborar esta delicia con la costumbre de que, cuando esté listo el pan, se coloca una canastilla tejida en los ingresos ubicados en la vía para informar al respecto.
Flor María Lata es una de las responsables de preparar este pan, lo hace en su hogar situado a unos 400 metros de la iglesia parroquial. Con su esposo, un sobrino y una vecina trabajan desde las 05:00 para que, entre las 09:00 y 10:00, estén listos los primeros panes.
Aprendió de su madre, Targelia Auquilla, el manejo y uso del horno, prepara alrededor de 1.500 panes diarios, es decir 45.000 al mes y 540.000 panes al año. Asegura que en el centro parroquial existan más de 10 panaderías parecidas que incrementaron tras la pandemia de la COVID 19.
Atractivos de Nulti
En la parroquia, ubicada al noreste de la ciudad de Cuenca, son varios los atractivos naturales, arquitectónicos y las tradiciones populares. Un grupo de jóvenes, quienes integran el Club de Turismo de Nulti, son los responsables desde hace más de tres años de difundir todos estos lugares con su labor de guías.
Xiomara Marcillo y Evelyn Saca, de 21 y 23 años, respectivamente, realizan esta actividad porque conocen de la historia, personajes, lugares, leyendas y hasta de las disciplinas deportivas que se practican en el territorio aprovechando de sus cerros, planicies, senderos y montañas.
Un personaje que nunca falta en todas las fiestas es el “Ruco”. Se caracteriza por usar un atuendo llamativo sobresaliendo por su máscara de color blanco y un sombrero de paja toquilla.
“Es un personaje muy divertido, cuida, divierte en las fiestas, bromea con cualquier persona, nadie se puede ofender”, comenta Evelyn para decir que este ser mítico utiliza una escoba para que, cuando terminan las fiestas, barrer para quitar las malas energías.
Entre los atractivos naturales está el mirador de Jalshi, situado a menos de cinco minutos en vehículo del centro parroquial.
Sebastián Auquilla, quien es el presidente de la Junta Parroquial de Nulti, destaca este mirador donde se han realizado algunas obras con el paso de los años para mejorar su imagen. “La vista es única, se pueden ver localidades de dos ciudades Cuenca y Azogues, cuenta con espacios para el deporte, realizar asados hasta existe un horno de leña para el pan”, expresa.
Los artesanos de la parroquia
Los artesanos son parte de la historia de la zona, pues hay de todo demostrando las destrezas y habilidades de la población. Pablo Zúñiga se dedica a la cestería manteniendo el oficio de su abuelo.
Enamorado del arte desde niño aspira continuar con la labor, inculcarla a más personas con el afán de que no se pierda.
Es un parroquia importante, transcendental, tranquila con índices migratorios, necesidades y virtudes. Nulti resulta acogedora con grandes aspiraciones de desarrollarse turísticamente. (BPR)-(I)
DETALLES
– 156 años cumplirá de parroquialización Nulti en el próximo mes de septiembre.
– También en septiembre son las fiestas religiosas en honor al Señor de los Milagros. Los eventos congregan un gran número de personas.
– Otro de los atractivos es el cerro El Plateado, considerado un sitio paleontológico de gran importancia.
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