Miembros de las Fuerzas Armadas (FF.AA.), tras un operativo contra la minería ilegal este miércoles 27 de agosto, destruyeron tres bocaminas en Camilo Ponce Enríquez, en Azuay.
Los uniformados provocaron explosiones en los accesos a las minas con el fin de bloquear sus entradas y salidas, e impedir que mineros ilegales continúen con la extracción de material para obtener oro.
Los militares, asimismo, detuvieron a tres ciudadanos que estaban en esta zona, quienes quedaron a órdenes de la autoridad competente para las investigaciones correspondientes.
La operación militar se ejecutó en coordinación con la Agencia de Regulación y Control Minero (Arcom), que también dispuso la clausura de las actividades ilegales en este sector.
El material aurífero que estaba almacenado junto a las minas fue decomisado y quedó bajo custodia de la Policía Nacional, como parte de las investigaciones por contaminación ambiental.
El pasado 6 de agosto, los uniformados también intervinieron en el sector de Carmen de Pijilí, en Camilo Ponce Enríquez, donde detuvieron a cuatro hombres, también por minería ilegal.
En esa operación, los militares decomisaron 250 sacos de material aurífero, dos rototaladros, una amoladora, tres baterías y una motosierra, además de equipos electrónicos.
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