Tras una temporada 2025 extensa y exigente, Paula Torres inicia un nuevo ciclo competitivo con la mira puesta en el inicio del 2026. La marchista del Team Banco Pichincha-CRISFE decidió no participar en los Juegos Bolivarianos para priorizar su recuperación y enfocarse en el Mundial de Marcha, que se disputará en abril, una fecha que exige una preparación anticipada.
“Ya habíamos competido muchísimo y cerramos con el Mundial, que era nuestro objetivo principal. Nos fue bastante bien y por eso decidimos entrar en un proceso de descanso y recuperación”, comentó. El 2026 comenzará con un cambio importante en su carrera: su debut en los 21 kilómetros.
La marchista destaca su 2025 como un año de evolución constante, en el que el trabajo junto a su entrenador, Andrés Chocho, marcó la diferencia.
“Sabía lo duro que habíamos entrenado. Lo que más valoro es la preparación con Andrés; ver cómo en cada entrenamiento y en cada competencia fui mejorando. Sin su guía no habría alcanzado lo que conseguimos. Ha sido un trabajo totalmente en equipo”, subrayó.
Torres llega al nuevo ciclo sin lesiones y tras resolver las molestias que venía arrastrando previo al Mundial. El plan de preparación incluirá entrenamientos en Ecuador, aunque no se descarta un campamento o competencias internacionales antes del Mundial, algo que definirá Chocho en las próximas semanas.
Aunque faltan tres años para los Juegos Olímpicos, Torres no pierde de vista el proceso. “La clasificación se abre entre 12 y 14 meses antes de la fecha. Por ahora es ir con calma, mejorar cada año en rendimiento, esfuerzo y disciplina. Cuando llegue el momento, estaremos listas”, comentó.
La única espina del año fue quedarse a un paso de la medalla mundial en los 20 kilómetros. “Sí, me hubiese gustado conseguirla. Estuvo ahí, literalmente. Pero son cosas que enseñan y que en futuras competencias no voy a dejar que se me escape”, concluyó. (D)
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