Vinchas de pelo hechas a mano en Paute, Azuay, se venden en Panamá. Las confecciona Astry Morocho Banegas, una joven madre que apostó por el emprendimiento.
De acuerdo con el Consejo Empresarial Ecuatoriano – Panameño, Morocho pasó de elaborar 7.000 unidades mensuales a producir 90.000 en menos de 30 días.
Ella creó la marca Soy Valentinas hace 11 años, surgida como una alternativa para generar ingresos sin dejar de cuidar a su hija en Paute. En 2025 Corporación La Favorita respaldó sus diseños.
La idea de confeccionar accesorios nació cuando buscaba diademas y lazos por el Día del Niño para su hija Doménica Valentina.
En un inicio los elaboró solo para uso personal, pero luego identificó una oportunidad de negocio y empezó a venderlos a familiares y amigos.
Expansión
Posteriormente distribuyó en locales de Gualaceo y Azogues, hasta que el proyecto se transformó en un negocio con mayor alcance e incluso con presencia internacional.
Con el aumento en la demanda, Morocho incorporó colaboradoras que apoyan en la confección de los lazos, hechos con materiales artesanales.
Actualmente estas vinchas están en las perchas de los establecimientos del Grupo Rey en Panamá. Una de las ventajas ha sido la cercanía geográfica.
Esto permite que el proceso de exportación sea más ágil, con menores plazos de entrega y mayor eficiencia logística, lo que contribuye a optimizar recursos y reducir costos operativos al máximo.
«Mi consejo para los emprendedores que sueñan con internacionalizarse es que crean siempre en su idea. Habrá momentos difíciles en los que las personas duden de su producto y las ventas bajen…», señala Morocho.
Y agrega: «es allí donde debemos ser resilientes y entender que es parte del proceso para crecer…».
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