
Las reuniones masivas de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) que se realizaban durante la presidencia de Leonidas Iza quedaron para el recuerdo, este 2 de octubre del 2025 el Consejo Ampliado, en el que se ratificó el paro nacional, contó con un número reducido de dirigentes.
Pese a que se había anticipado un registro para que la prensa pueda cubrir la inauguración del Consejo, finalmente, no se permitió el ingreso y los camarógrafos debieron retirar sus equipos instalados, fue entonces cuando se pudo constatar que la asistencia a la reunión fue mínima; en el salón de la Conaie, ubicado en el norte de Quito, no estaban más de 20 dirigentes.
La reunión fue a puerta cerrada y, pese a que se anticipó que se permitiría la cobertura periodística de la emisión de las resoluciones, los periodistas fueron desalojados, no solo del interior del edificio, sino incluso de la parte externa.
Lenin Farinango, presidente del pueblo Cañari, dejó en evidencia la dispersión que existe en el movimiento indígena, lo que ha desencadenado en la existencia de diversos voceros, principalmente de la provincia de Imbabura, cuando lo correcto, dijo, es que sobre el paro solo se pronuncie la Conaie, que es la organización que lo convocó.
Farinango se refirió a la confusión que se generó el miércoles 1 de octubre del 2025, cuando Federación de los Pueblos Kichwa de la Sierra Norte del Ecuador (Chijallta FICI) declaró una tregua y el inicio del diálogo para poner fin al paro, lo cual luego fue desmentido por sus bases.
Sigue el paro
En el Consejo Ampliado de la Conaie se resolvió que el paro nacional, que inició el 22 de septiembre pasado y lleva 12 días, se mantendrá vigente, mientras el presidente Daniel Noboa no derogue el Decreto Ejecutivo 126, con el que eliminó el subsidio al diésel.
“Hemos resuelto ratificar la continuidad del paro nacional, como expresión legítima de los pueblos y nacionalidades, frente a un Gobierno autoritario, que responde con represión, criminalización y medidas neoliberales que encarecen la vida”, afirmó Marlon Vargas, presidente de la Conaie.
Además, la organización indígena ratificó los seis puntos de su agenda de lucha, que incluyen, además de la derogatoria del Decreto 126; el rechazo al extractivismo; la reducción del Impuesto al Valor Agregado (IVA), del 12 % al 15 %; el fortalecimiento de la salud y educación pública, entre otros.
En cuanto a las manifestaciones, se pide el respeto a los derechos colectivos, las garantías plenas para el ejercicio del derecho a la resistencia y verdad, justicia y reparación para las víctimas de la represión, incluida la familia de Efraín Fuerez, muerto en el contexto de las movilizaciones en la provincia de Imbabura, epicentro del paro nacional.
Además, la Conaie pidió que organismos internacionales de defensa de los derechos humanos, incluida la Organización de Naciones Unidas (ONU), vigilen la “represión estatal ejecutada por el Gobierno de Daniel Noboa contra los pueblos y nacionalidades”.
Campaña contra la constituyente
La Conaie además resolvió que, sus tres regionales: la Confederación de Nacionalidades y Pueblos Indígenas de la Costa Ecuatoriana (Conaice), la Confederación de Nacionalidades Indígenas de la Amazonia Ecuatoriana (Confeniae) y la Confederación de Pueblos de la Nacionalidad Kichwa del Ecuador (Ecuarunari), realizarán campaña por el No en la consulta popular que busca instalar una asamblea constituyente.
“Vamos a organizar asambleas territoriales para consolidar la campaña por el No en la consulta popular, porque este mecanismo no responde a las verdaderas demandas del pueblo, sino que busca distraer la atención de la crisis social y económica”, recalcó el presidente de la Conaie.
Proponen un corredor humanitario
Desde el Gobierno, la vicepresidenta María José Pinto y John Reimberg, ministro del Interior, se pronunciaron sobre la necesidad de que los manifestantes de la provincia de Imbabura abran un corredor humanitario que permita el paso de medicinas y ambulancias, pues los hospitales de esta provincia se están quedando desabastecidos.
“Impedir el paso de ambulancias, tanques de oxígeno y ayuda humanitaria hacia los hospitales, centros de abasto de Imbabura y otras partes del país, no es protesta, es atentar contra la vida de los ecuatorianos”, afirmó Reimberg.
Entre las resoluciones que tomó la Conaie se decidió establecer un corredor humanitario en los puntos de resistencia, que garantice el paso seguro de medicinas, insumos médicos y ambulancias hacia hospitales y centros de salud. (I)