En la víspera del Corpus Christi, los devotos del Señor de Girón acuden hasta el río El Chorro para sumergirse en sus aguas. Esta costumbre radica en que consideran a ese espacio como un lugar sagrado porque, según los creyentes, el baño alivia los dolores y los purifica.
La tradición ya se viene realizando desde hace al menos cuarenta años, según Julio Espinoza Campoverde, autor de un artículo sobre la celebración del Corpus Christi en el cantón Girón.
«Hace unos cuarenta años, los devotos del Señor de Girón, en la madrugada, a las tres o cuatro de la mañana, acudían al río Chorro que atraviesa el área urbana, para tomar un baño “purificador” en las frías aguas, convencidos de que se purificaban y podían alcanzar el favor y la protección del Cristo Crucificado», escribió Espinoza en su texto que se publicó en la revista Girón 360.
Creyentes volvieron a El Chorro
En este 2025 no hubo excepciones entre los creyentes del Señor de Girón, quienes volvieron en la madrugada de este 19 de junio al río El Chorro para sumergirse y recibir la sanación y purificación a través de sus aguas.
Horas antes, el padre de la parroquia eclesiástica San Juan Bautista de Girón, Julio Castillo, acudió hasta el río para bendecir el agua. Luego las tomó y las roció sobre la cabeza de los fieles que acudieron hasta el lugar.
Cumplido con el acto de demostración de fe, por su lado, la población de Girón se apresta a vivir la fiesta septenaria con las misas, con los dulces y con el fervor de cada día. (I)
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