Un fuerte estruendo despertó la madrugada de ayer a cuatro familias quienes dormían placenteramente en sus hogares. El deslizamiento de tierra había destruido parte de sus viviendas lo que hizo salir apresuradamente del lugar.
El hecho ocurrió en el sector La Floresta de Miraflores, al noroeste de la ciudad de Cuenca.
Paola Franco, una de las afectadas, narra que a partir de las 05:30 escucharon un estruendo que les despertó y lo primero que hicieron fue ir a ver a su hija menor, pues los jóvenes ya habían salido de su vivienda.
En ese instante vieron como la tierra había destruido paredes y ventajas de la parte baja de su casa, esto, a raíz de un derrumbe de grandes proporciones que ocurrió debido a las constantes y fuertes lluvias que azota a la ciudad y la región.
Pero no solo ellos, salieron apresuradamente, puesto que, en la zona habitan sus hermanos, mismos que también abandonaron las casas porque la tierra había ingresado a la parte posterior. Inclusive cuentan que, una tercera vivienda ya fue desahitada un mes atrás porque ya se produjo un derrumbe que rompió una parte de la pared que daba a la montaña.
Pedido
Paola Franco, manifiesta que, ya pusieron en conocimiento a las autoridades pertinentes, sobre todo en la Dirección de Gestión de Riesgos, ya que, ya habían existido el deslizamiento de piedras que golpeaban los muros, sin embargo, no tuvieron la respuesta inmediata y hoy los “efectos son estos”, relata, una de las afectadas.
Este lunes, tras haberse suscitado un daño mayor, en primera instancia llegaron personal de Bomberos Cuenca para auxiliar a los afectados, y más tardes, nuevamente llegaron los técnicos de Gestión de Riegos para analizar la situación, siendo la primera advertencia el no poder habitar las casas.
“Sabemos que ya no podemos permanecer en nuestras casas, pero no tenemos a donde ir. Estamos endeudados y la situación no nos permitirá ir a arrendar, por ahora nos quedaremos en la casa de mi mamá que no está afectada, pero pedimos a las autoridades que nos colaboren con la limpieza y desalojo del material, además de estabilizar la montaña que es del mismo municipio”, recalcó Franco.
También, piden la ayuda para recuperar los enceres que permanecen dentro de las viviendas y los que están enterrados y así ponerlos a buen recaudo.
Otro deslizamiento
Sin embargo, no es la única zona afectada por las fuertes lluvias, unos metros más adelante, en las intersecciones de las calles Pitagoras y La Floresta, barrio conocido como la ‘Chicha Huevona’, existe gran material desprendido hacia la calle, lo que en primera instancia obstaculizó el paso vehicular y hay el temor de que el deslizamiento sea más grande. (I)
