Hueco, despoblado, desierto, desolado, desprovisto, falto, carente, inane, insustancial, nada, vacuidad, oquedad, ausencia, frívolo, superficial, infundado, estéril. Ninguno de estos epítetos, por más contundentes que parezcan, alcanza para calificar la mayoría de las campañas políticas que los candidatos a todo tipo de dignidades desplegaron recientemente. ¿Qué concepción tienen estos candidatos —o sus asesores— sobre los …









