El mal llamado debate no fue más que un concurso de preguntas y respuestas apresuradas a 16 candidatos que, con contadas excepciones, si se los ve por la calle se confunden con facilidad con cualquier transeúnte. No así los debates de antaño, como el de 1984 entre Febres Cordero y Borja quienes derrocharon una capacidad …











