En política es difícil practicar la coherencia, mucho peor si ideológicamente se es vacuo, o los pocos principios son débiles, aunque por serlos no deberían considerarse como tales. Un buen político demuestra personalidad, liderazgo, brinda confianza, tiene poder de convocatoria, cuando pone en práctica cuanto pregona y se pone al frente para dar ejemplo. Si …









