Sin Plan

Ana Abad R.

“Pensábamos que había un plan de vacunación”. Más allá del enojo y de la indignación que ha causado esta declaración del señor Moreno –dicha con tanta simpleza– y que nos ha “dejado sin palabras” y con mucha “vergüenza ajena”, es desolador verificar que no sólo no hay Plan, no hay Gobierno, no hay Presidente, nunca lo hubo porque los “revolucionarios” del siglo XXI pretendían manejar el poder a través del pusilánime carácter del señor Moreno, a quien lo han calificado sus ex-compañeritos como “traidor”. Sin credibilidad alguna, con un desgrane paulatino de “su equipo”, expulsado de su Movimiento, con todos sus “amigos y aliados” tratando de alejarse de él como si fuera la peste misma, con su familia en la Fiscalía para investigación por el caso de la “Vacunación VIP” y con su último Ministro acusado por el posible delito de tráfico de influencias, sus últimos días en el Palacio de Carondelet deben ser la peor pesadilla de su vida. No hay cómo hacer leña del árbol caído, dice el adagio popular, sin embargo, son lapidarias las palabras del señor Moreno porque muestra con absoluta claridad el colapso no solo del sistema público de salud sino del quebranto de una Democracia herida por sus mismas autoridades e instituciones. (O)