Ser tendencia en las redes sociales es la obsesión de lo políticos, especialmente de quienes son candidatos a algo. Ser tendencia significa que la mayor cantidad posible de gente esté hablando de ellos en las redes. No importa que hablen bien o mal. Lo que importa es que hablen.
Ser tomado en cuenta es la sangre que da vida a un candidato o a quien aspira a serlo en las próximas elecciones. Y, los ecuatorianos siempre estamos en vísperas de elecciones. Ser tomado en cuenta significa que está vivo. No ser tomado en cuenta- no ser tendencia- es como estar muerto. Mientras muchas personas viven discretamente y tratan de mantener un bajo perfil, los candidatos hacen todo lo contrario. Si para ser tendencia tienen que bailar, llorar, vestirse de alienígena y si es del caso desvestirse en público, pues eso tienen que hacer. Así mandan los manuales de propaganda y así recomiendan los asesores de imagen.
Un conocido ex ministro de gobierno me decía hace poco que alguna vez conversando con el ex Presidente Velasco Ibarra, le comentó que le parecía terrible el reciente escándalo de un político opositor a Velasco y que eso le afectaría. El doctor Velasco le respondió que no era así. Un político tiene que estar en boca de la gente, le dijo con aplomo. Qué mejor si es por buenas acciones. Pero si no… no importa que sea por escándalos o pasos en falso. Un político tiene que estar en boca de la gente, insistió. Si no lo está, está muerto, sentenció Velasco, el político que mayor presencia tuvo en la vida nacional durante el siglo pasado.
En ese contexto, las escenas de la Alcaldesa de Guayaquil y pidiendo a la gente que se vistan como quieran y también que se desvistan como quieran, a propósito de los comentarios y críticas con motivo de su reciente boda, no es políticamente un desliz. Es un paso para ser tendencia y ganar las próximas elecciones a las que se presentará para su reelección. El fin justifica los medios según Maquiavelo. Y el fin en política es ganar, no perder. (O)
