Descentralización, años de espera

Fernando Cordero, Xavier Muñoz Chávez y María Augusta Muñoz.

La descentralización es uno de los principales desafíos que tendrá el nuevo presidente o presidenta de Ecuador. Daniel Noboa y Luis González han expuesto sus propuestas sobre esta temática con miras a las elecciones del 15 de octubre próximo.

La Constitución dedica amplio espacio a la descentralización. En su artículo 1 se establece que “(el Estado)…se gobierna de manera descentralizada”. Y no solo en este apartado. En el Capítulo Quinto de la carta magna se aborda de manera más profunda.

Ambas candidaturas han expuesto sus ideas sobre este tópico y ambos coinciden en entregarles mayor capacidad de decisión sobre sus recursos a los gobierno autónomos.

Análisis

Fernando Cordero, exalcalde de Cuenca y expresidente de la Asamblea Nacional, detalló que el nuevo mandatario o mandataria debe asumir este desafío con decisión.

En la Constitución, recuerda Cordero, se establecen los cuatro tipos de gobiernos autónomos descentralizados. Están los provinciales, municipales, de las juntas parroquiales y uno que no se ha implementado aún, el regional.

La descentralización para la creación de gobiernos regionales fracasó. Esto se confió a los prefectos para que lo ejecuten entre 2008 y 2016, pero no se hizo nada, aseguró Cordero.

“Comenzaron las disputas personales y perdió importancia”, añadió. Ahora le toca al Gobierno plantear una ley y crear las regiones autónomas. Aseguró que no hay voluntad política para transferir las competencias.

“Hoy, el Ecuador está representado por un centralismo asfixiante… En los recientes dos gobiernos no ha habido un intento por descentralizar nada”, cuestionó.

Como ejemplo, explicó que descentralizar es transferir poder a las provincias como Azuay. “Pagamos costo de otras vías del Ecuador…pero ¿por qué no hacer que se queden aquí? se preguntó Cordero.

La respuesta en acciones la esta promoviendo Azuay, comentó. La creación de mancomunidades y consorcios esta avalada por la Constitución. Lo que está haciendo Azuay entre alcalde y prefecto es un buen inicio.

“Y porque no pensar en hacerlo con Loja, Morona Santiago y Zamora Chinchipe… Ahora hace falta pasar del discurso a la ejecución”, sentenció.

Cordero recordó que en caso de crearse esta mancomunidad, al Gobierno central le correspondería, no solo entregar recursos que por ley corresponden, además puede otorgar recursos adicionales.

Ante estas iniciativas, le queda al nuevo Gobierno responder de manera positiva facilitado los recursos necesarios, observó Cordero. Así, los gobiernos regionales podrán administrar los recursos para su vialidad, por ejemplo.

Competencias

María Augusta Muñoz, exgobernadora y exsubsecretaria de la Senplades, consideró fundamental que el nuevo Gobierno recupere las disposiciones establecidas en la Constitución en la que se establece “promover el desarrollo equitativo, mediante un proceso de autonomía y descentralización”.

El nuevo Gobierno debe analizar tres asuntos, mencionó Muñoz. Primero, saber que la Constitución y el Código de Ordenamiento Territorial (Cootad) establecen qué temas deben ser gobernados y gestionados en forma descentralizada.

Segundo, saber que, en materia fiscal, no se puede ejecutar nada si no se cuenta con recursos y para esto se requiere decisión política. De acuerdo con la Constitución, ninguna competencia puede ser transferida sin recursos, detalló.

Y, el tercer elemento es hacer una evaluación de cómo ha avanzado el Plan de Descentralización. Saber cuál es la situación actual, con las autoridades locales entender cuáles son los cuellos de botella y qué aspectos deben mejorarse.

El nuevo Gobierno debe tener una predisposición al diálogo y una agenda que promueva la descentralización, apuntó Muñoz en su análisis. (FCS)-(I)

“Una debilidad es la falta de la independencia”

Para Xavier Muñoz Chávez, exprefecto del Azuay, los gobiernos autónomos no han podido actuar con independencia y esto los ha debilitado.

Pero también cuestionó a ciertos gobiernos en los que se evidencia una suerte de “quemeimportismo al momento de pedir competencias y responsabilidades”.

Unificar esfuerzos entre cantones, juntas parroquiales y provincias, permitiría aglutinar criterios para que las propuestas sean analizadas y aceptadas, detalló Muñoz.

Y agregó que las mancomunidades son una alternativa y unirse es un gran paso al desarrollo conjunto sin temer a la descentralización.

Reconoció que este tema se lo habla desde hace mucho tiempo y apuntó que en la práctica no es posible sin recursos y mecanismos claros.

Calificó a la existencia de mancomunidades y consorcios de positivas, ya que esto permite contar con herramientas para actuar sin depender del Gobierno Nacional.

A su criterio la creación de un gobierno regional no es recomendable porque cuatro espacios de gobernabilidad son suficientes. (I)

Propuestas de los presidenciables

Luisa González

– Recuperar la ruta del Estado descentralizado y desconcentrado, que potencie los territorios.

– Apoyar a los gobiernos autónomos en la creación de mancomunidades.

– Créditos desde la banca pública y cercanía con los GAD.

– Recuperar la planificación estratégica para establecer prioridades y orientar la inversión pública.

– Transparentar el uso de los fondos públicos y rendir cuentas para aumentar la confianza en el Gobierno permitiendo e incentivando el control ciudadano.

Daniel Noboa

– Darle fuerza y peso a la descentralización para que cada provincia pueda administrar sus recursos.

– Contar con planificación central, pero con descentralización en la ejecución.

– Incrementar el presupuesto a los gobiernos parroquiales rurales

– Entregar recursos de manera emergente a los GAD en caso de emergencias naturales.

– Implementar programas de participación comunitaria que permitan a los ciudadanos tener voz en la planificación y gestión de los servicios sociales.