René Rivera Aguirre migró en 1999 a los Estados Unidos (EE.UU.) cuando apenas tenía 19 años de edad. El ímpetu que lo caracteriza lo ha llevado a tener su propia empresa para dar trabajo a más cuencanos como él.
La actividad que realiza es el mantenimiento y reparación de los edificios que se ubican en localidades de Brooklyn y Buffalo, en Nueva York. Su compañía, “Rivera Maintenance”, lleva 18 años de labores prestando sus servicios en más de 50 inmuebles.
Para Rivera, cumplir sus sueños no ha sido nada fácil porque tuvo que aprender a trabajar en actividades que jamás las realizó en el Ecuador. En sus primeros años en Norteamérica laboró en la construcción junto con su padre, quien tiene su mismo nombre.
Por desacuerdos laborales se separó de su progenitor. Afrontó unos seis meses complicados tras esta decisión porque no conseguía trabajo. El apoyo de su esposa Jenny Arteaga, de su suegra, madre y hermano fueron fundamentales para mantenerse.
Las adversidades persistían hasta que conoció a Xavier Galán, un cuencano que se dedica al mantenimiento de los edificios. Precisamente, él le introdujo en este oficio.
En el primer edificio que laboró se dedicaba desde sacar la basura hasta reparar puertas, ventanas, inodoros y cualquier otro daño. Lo hacía los siete días de la semana sin importar las fechas festivas.
Ascendió a supervisor
Por las ganas que le puso a su trabajo ascendió rápidamente a la función de supervisor. Asimismo, el número de edificios a su cargo incrementó por lo que necesitaba de ayuda.
Además que incursionó en la remodelación de departamentos lo que era un plus. Todo esto sirvió para que implemente su empresa que inició con unos pocos trabajadores hasta que se posesionó en el mercado.
La responsabilidad de mantener edificios
“He llegado a tener hasta 25 trabajadores por la cantidad de contratos para mantener los edificios”, dijo Rivera, quien cumplirá 46 años en septiembre próximo.
Una de las particularidades de su empresa es que todos los trabajadores son cuencanos, quienes viajaron por las fronteras de Centroamérica en búsqueda del sueño americano. Labora en estos momentos con 21 personas, de los cuales, algunas se encargan del mantenimiento y otras de la limpieza de los edificios.
René Rivera tiene trabajadores de confianza
Entre sus trabajadores está Danny Auquilla, quien es su primo y se convirtió en su mano derecha junto con Fabián Saeteros y Marco Parra. Con ellos coordina varias de las actividades para cumplir los contratos.
René Rivera accedió en el año 2017 a la residencia norteamericana. Con este documento ha retornado por cuatro ocasiones al país para visitar a su madre, Teresa Aguirre, y su hijo Sebastián Rivera, quien ya es padre de familia y profesional de la ingeniería.
Traer a su madre es su sueño
De allí, surge uno de sus sueños: llevar a su madre a Estados Unidos para que conozca, comparta con sus nietas, y, si desea, se quede a vivir.
Por otro lado, aspira que su compañía siga creciendo para llegar a otras ciudades de los EE.UU., y generar más empleo para otros migrantes, principalmente ecuatorianos que se comprometan en salir adelante.
René Rivera un ejemplo
La historia de Rivera demuestra que los sacrificios dan resultado aunque cuesten lágrimas. Dejó el país demasiado joven sin imaginarse que llegaría lejos para cumplir sus sueños y ayudar a los demás. -(I)
FRASE
“Uno nunca se olvida de la tierra donde nació, me hace falta, siempre que tengo la oportunidad regreso al Ecuador. He retornado cuatro veces, y, si Dios quiere, lo haré nuevamente en los próximos meses”.
René Rivera Aguirre, dueño de compañía en Estados Unidos.
DETALLES
25 años lleva René Rivera en Estados Unidos luego de migrar en busca de mejores días; en Cuenca residía en la ciudadela Roberto Crespo Toral.
Antes de migrar laboraba como vendedor de una empresa local que se dedicaba al expendio de jugo de naranja de la marca Tampico.
René Rivera coordina desde su casa la mayoría de actividades de la compañía con personas de confianza que se encargan en territorio.
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