Los sectores urbanos del profesorado en Bolivia marcharon este miércoles en varias ciudades del país contra el nuevo plan de estudios que el Gobierno del presidente Luis Arce pretende implementar en esta gestión y que fue calificado como una forma de «ideologizar» a niños y adolescentes.
Las movilizaciones se realizaron en varias de las principales ciudades del país como Santa Cruz, la mayor región boliviana, La Paz, sede del Gobierno y el Parlamento, Cochabamba, Oruro y Sucre, la capital constitucional del país, junto a algunas organizaciones de padres de familia con críticas hacia los contenidos y las condiciones de su aplicación.
En las protestas, varias de las pancartas cuestionaron la labor del ministro de Educación, Édgar Pary, por el proceso en el que aseguró se «consensuó» con distintos sectores, y calificativos al nuevo plan de estudios de «pachamamista», en relación a la orientación indigenista que caracteriza al Gobierno.
En declaraciones del dirigente José Luis Álvarez mencionó que el nuevo plan atenta contra la «calidad de la educación» pues asignaturas como inglés, lengua originaria o robótica no tienen carga horaria ni un presupuesto propio.
Están «obligando» al maestro de aula a ceder «horas destinadas a matemática, lenguaje, ciencias naturales y sociales» a las nuevas asignaturas, a lo que se suma que no han sido formados para esa especialidad.
Los reclamos también señalan que la nueva planificación no tiene «condiciones materiales» y posee errores en la «secuencialidad de contenidos» con temáticas que se enseñan al final de la secundaria cuando debieran estar al principio, aseveró la dirigente Vilma Plata.
«Ideologización» de la educación
Javier Iturralde, un padre de familia que se opone al nuevo plan de estudios, criticó que supuestamente se busque aplicar la «ideología de género» bajo la forma de una «educación sexual integral».
«No queremos que el Estado se meta en la intimidad de las familias bolivianas», «no estamos en contra de nadie, sino (en oposición) a ideologizar a nuestros niños», dijo.
Por su parte, Plata mencionó que se ha evidenciado un «manejo ideológico instrumentalizado» cuando en los textos de primaria se explica que hubo un «golpe de Estado» en 2019 y no una «versión equilibrada» que hable también de un «levantamiento popular» contra el entonces presidente Evo Morales.
La maestra también criticó que se tome como «materias transversales» todas aquellas cuestiones «que el Gobierno no puede resolver», como la violencia de género, y esto lo haga el sistema educativo.
Entre los cambios que presentó el Ministerio de Educación están nuevas temáticas como origami, despatriarcalización en la familia, alimentación saludable, técnicas de cosecha, autocontrol y justicia social, en el nivel primario.
Mientras que en secundaria algunas de las nuevas asignaturas son sexualidad humana integral, salud sexual y reproductiva, derechos sexuales y reproductivos, feminismos, además de la continuidad de contenidos sobre lengua extranjera y nativa o aspectos relacionados a tecnología.
El Gobierno señaló que la modificación forma parte de un proceso que inició en un encuentro educativo en diciembre de 2020 y que se ha trabajado por unas 57 instituciones.
En esta jornada el Ministerio de Educación y la estatal Agencia de Gobierno Electrónico y Tecnologías de Información y Comunicación (Agetic) presentaron un programa de instrucción para profesores en robótica orientado a la aplicación del nuevo plan educativo.
El nuevo diseño educativo también ha sido cuestionado por la Iglesia católica y las agrupaciones evangélicas.
