Ante la proximidad de que el juicio político al Presidente Lasso pase a tramitarse en el pleno de la Asamblea Nacional, aumentan los rumores y denuncias de que el Gobierno, para lograr salvar a Lasso de una posible destitución, está tratando de lograr votos a su favor a cambio de la entrega de cargos, de prebendas, e incluso de dinero; una situación conocida popularmente con la expresión de “compra de conciencias” que, además, ha actualizada la famosa y fantasmal figura del “hombre del maletín”.
Si esto es cierto no sería raro que esto se dé, pues la política en general es maquiavélica y, por lo tanto, sin ética; una situación que también ha ocurrido antes en Ecuador y que se da en otros países. Empero para el Gobierno actual, si esto se comprueba, la situación sería más grave tanto ética como políticamente, pues su nivel de aprobación y de credibilidad ha caído a un nivel casi insostenible, como consecuencia de su desgobierno en múltiples campos.
Si el Presidente Lasso quiere salvarse de la destitución en condiciones que políticamente le favorezcan, y de manera digna, los apoyos que reciba en la Asamblea deben ser porque los argumentos lograrían mostrar que políticamente no sería responsable de las irregularidades (peculado) en FLOPEC; algo ciertamente difícil de mostrar, como lo plantearían incluso connotados constitucionalistas de derecha (como Ismael Quintana y Rafael Oyarte).
Por otro lado, la “compra de conciencias” no se podría dar sino no existiría como contrapartida la “venta de conciencias”; una venta que tendría como protagonistas a algunos legisladores de PACHACUTIK; una cuestión que se denotaría, por ejemplo, en un reciente audio del portal “La Posta”, donde la subdirectora de dicha organización habla de pedir algunos Ministerios al Gobierno; recordemos también la acusación del Presidente Lasso, realizada hace meses, en el sentido que 6 asambleístas de PACHAKUTIK le habrían pedido dinero para apoyar el Proyecto de Ley de Inversiones. Se habla también de que, en el escenario del juicio actual al Presidente, estarían siendo mercantilizados algunos votos de asambleístas de la ID e “independientes”.
El nihilismo y la traición la ideología parecen campear, hoy más que nunca, en la política criolla. (O)
