El ataque perpetrado hoy 3 de mayo de 2023 en Belgrado por un joven de 14 años en una escuela que ha acabado con la vida de nueve personas, entre ellas ocho menores de edad, se une a la lista de matanzas en centros educativos europeos y es también una de las peores masacres ocurridas en Serbia en lo que va de siglo.
Hace 10 años, el 9 de abril de 2013, un sexagenario mató a tiros a trece personas, entre ellas seis mujeres y un niño de dos años, en la aldea serbia de Velika Ivanca, a unos 50 kilómetros al sur de Belgrado, en una venganza familiar.
El hombre acabó primero con la vida de su hijo, de 42 años, luego con la de su madre, y después dejó herida grave a su esposa, antes de continuar la matanza por las viviendas vecinas, la mayoría habitadas por parientes suyos.
Otra masacre similar ocurrió el 27 de julio de 2002, cuando un hombre de 32 años mató en menos de media hora a siete personas, entre ellos a su esposa, e hirió de gravedad a otras cuatro en la ciudad meridional serbia de Leskovac.
LOS PEORES ATAQUES EN CENTROS EDUCATIVOS EUROPEOS
El tiroteo con mayor número de víctimas mortales ocurrido en Europa en los últimos años tuvo lugar el 17 octubre de 2018 en un instituto de la ciudad de Kerch, en Crimea (anexionada por Rusia) y en él murieron 20 personas y resultaron heridas otras 50 por los disparos de un alumno contra estudiantes y profesores.
Cuando se le acabó la munición, el agresor detonó una bomba de fabricación casera y se quitó la vida.
La siguiente peor tragedia en un centro educativo europeo, por número de víctimas, se produjo el 13 de marzo de 1996 cuando un hombre asesinó a tiros a dieciséis niños y a una maestra en un colegio de la localidad escocesa de Dunblane (Reino Unido) y después se suicidó.
El 26 de abril de 2002 un joven mató a dieciséis personas y después se suicidó en venganza por su expulsión en un instituto de Erfurt (Alemania). Entre los asesinados se hallaban la subdirectora del centro, doce profesores, una secretaria y dos alumnos.
Otras quince personas murieron el 11 de marzo de 2009 en Alemania por el ataque de un joven de 17 años en tratamiento psiquiátrico.
El atacante irrumpió en la escuela en la que había cursado sus estudios en la localidad de Winnenden y mató a nueve alumnos y a tres profesoras. Durante la posterior fuga, que finalizó en Wendlingen tras secuestrar a un automovilista y recorrer mas de 40 kilómetros, asesinó a otras tres personas antes de suicidarse.
También murieron quince personas, y otras 24 resultaron heridas, por el ataque de un exalumno a una escuela de la república rusa de Udmurtia, en los Urales, el pasado 22 de septiembre.
El 7 de noviembre de 2007 un estudiante de 18 años acabó con la vida de ocho personas en un instituto de enseñanza media de Tusula, en el sur de Finlandia, tras lo cual se disparó en la cabeza. La masacre había sido anunciada previamente en un vídeo que el autor colgó en YouTube.
También en Finlandia y apenas un año después, el 23 de septiembre de 2008, un estudiante mató a tiros a nueve compañeros y a un profesor de una escuela de formación profesional de hostelería en la localidad de Kauhajoki.
El 11 de mayo de 2021 un exalumno de una escuela de Kazán, en la república rusa de Tatarstán, irrumpió a tiros en el centro educativo y causó nueve muertos y 23 heridos, la mayoría de ellos niños. EFE