La policía china inició una investigación a un portal de noticias que usó el popular software de inteligencia artificial ChatGPT para generar y difundir artículos falsos con el objetivo de obtener una gran cantidad de tráfico y ganancias.
Los agentes descubrieron un artículo en Internet que afirmaba que un tren había descarrilado y se había incendiado en Pingliang, en la provincia occidental de Gansu, provocando numerosas víctimas mortales, informaron hoy diferentes medios locales.
Tras verificar que se trataba de una información falsa, la policía inició una investigación y descubrió que el artículo había sido publicado por 21 cuentas de Baidu, el principal buscador chino, que pertenecían a una empresa de medios con sede en Shenzhen, en el sur del país.
El representante legal de la empresa, apellidado Hong, y su hermano menor, son sospechosos de haber cometido el delito de fabricar y difundir rumores.
Según la Policía, el hermano menor de Hong compró una gran cantidad de «cuentas de Baijia», un servicio de Baidu que permite a los usuarios crear y publicar contenido original, y editó las noticias con el software de inteligencia artificial ChatGPT, que genera textos a partir de palabras clave.
El objetivo era obtener una gran cantidad de tráfico y ganancias mediante la publicación de noticias falsas y sensacionalistas que cubrían múltiples ubicaciones en todo el país.
La policía ha puesto bajo custodia al hermano menor y ha congelado las cuentas bancarias relacionadas con el caso.
La investigación sigue en curso y las autoridades han advertido a los internautas que no creen ni difundan rumores en línea.
En las últimas semanas, este tipo de ‘chatbots’ han suscitado gran interés en el país asiático, hasta el punto de que la prensa oficial ya ha advertido de una posible «burbuja» en el mercado debido a un «entusiasmo excesivo» sobre esta tecnología.
El pasado mes de abril, el regulador chino de Internet publicó el borrador de una normativa que regulará el sector de la inteligencia artificial, al que se exigirá que el contenido creado por ‘chatbots’ y otros modelos generativos «refleje los valores fundamentales socialistas» y no «socave la unidad nacional», «subvierta el poder del Estado» ni «incite a dividir el país».
El revuelo en torno a ChatGPT en China también ha dado paso a preguntas acerca de la aplicación de este tipo de tecnología en el país asiático debido a la fuerte censura que imponen las autoridades. EFE