El proyecto de interconexión eléctrica entre Ecuador y Perú estará listo en el 2027 y tendrá una capacidad de 500 mil voltios.
La interconexión eléctrica de Ecuador con Colombia, inaugurada hace 20 años, les ha servido a los dos países para colaborarse mutuamente en épocas de estiaje y ha evitado que queden desabastecidos, ahora el país pretende emular este proyecto con Perú, con la construcción de una superautopista eléctrica de 500 mil voltios, que comenzará a funcionar en primer semestre del 2027 y tendrá un costo de USD 289 millones.
Para la ejecución del proyecto, fue vital que el pasado 21 de mayo la Corporación Eléctrica de Ecuador (CELEC) obtuviera la licencia ambiental emitida por el Ministerio de Ambiente, Agua y Transición Ecológica; y que el Gobierno haya autorizado la entrega de créditos a favor de la empresa estatal.
Según informó Santiago Uquillas, gerente de CELEC, de los USD 289 millones que se requieren para el proyecto, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) concederá USD 125 millones, además se gestiona un crédito con el Banco Europeo de Inversiones por 150 millones, la diferencia la cubrirá la empresa estatal con recursos propios.
En agosto del año actual se espera firmar el contrato de crédito con el BID y en septiembre con el BEI; para febrero de 2024 saldrá el proyecto a licitación, se adjudicará en octubre del 2024 y se planifica que las obras empiecen enseguida y que esté operativo en el primer semestre del 2027.
¿Cómo será la conexión?
La superautopista de extra alta tensión, que llevará energía de Ecuador a Perú y viceversa, conectará a la central Coca Codo Sinclair, la más grande del país, a través de las subestaciones San Rafael, El Inga, Tisaleo, Chorillos y Pasaje, con una línea de transmisión hasta la frontera con Perú y de ahí a la subestación Piura, en territorio peruano. Tiene un total de 800 kilómetros de longitud.
Mientras, el proyecto de interconexión eléctrica Ecuador – Perú está configurada con líneas de transmisión de 500 mil voltios, que conectará la subestación Chorrillos, en Guayaquil; con la subestación Piura, en Perú, con un estimado de 550 kilómetros de longitud, solo el tramo ecuatoriano comprende de 280 kilómetros, desde Chorrillos hasta la frontera peruana.
La eficacia del proyecto, según explicó Uquillas, radica en que las matrices eléctricas y energéticas en ambos países son complementarias, es decir, la matriz de Perú es fuerte en gas natural, mientras que la ecuatoriana es fuerte en la hidroelectricidad.
Proyectos complementarios
Además de permitir el intercambio de energía, la construcción de la superautopista eléctrica fortalecerá el sistema eléctrico en el sur del país. Las provincias de El Oro, Guayas, Loja se beneficiarán con la incorporación de la subestación Pasaje. Además, se garantizará la integración de los futuros proyectos de generación que se desarrollan en la zona suroriental del país, como los fotovoltaicos en Loja, El Oro y Azuay.
La ampliación y modernización del sistema nacional de transmisión también será financiada por el BID, con los créditos BID 5 y BID 6, que totalizan USD 241 millones.
Los resultados de la interconexión con Colombia
El proyecto de interconexión eléctrica con Colombia comenzó a operar desde el 2023 y ha sido beneficioso para los dos países. Según informó Fernando Santos Alvite, ministro de Energía, actualmente Ecuador exporta a Colombia 5.392 megavatios hora, es decir, una central de 250 megavatios que está funcionando las 24 horas.
La entrega de esta energía ha generado ingresos para el país, en mayo CELEC vendió a Colombia más de USD 9 millones y en junio se espera que totalicen los 12 millones.
Sin embargo, a finales del 2022 fue Colombia quien abasteció a Ecuador, en la época de estiaje, entregándole 450 megavatios, cantidad que le permitió salir sin problemas de la temporada seca.
“La integración eléctrica permite que, cuando un país es deficitario y otro excedentario en generación eléctrica, complementarse y evitar problemas de suministro. La integración es beneficiosa en todos los sentidos, estamos dando los pasos para que esa integración pase de la teoría a la realidad”, afirmó el ministro.
