Estos días de cielo limpio y sol abrazador, de vientos impredecibles y atardeceres inmensos, caminar la naturaleza es una halagadora alternativa que se puede resolver en paseos puntuales por calles, plazas y avenidas; por las orillas de los ríos y los parques lineales nuevos lugares de encuentro, recreación y deporte; por nuestras colinas, miradores y reservas ecológicas como el Cajas o el Bosque Protector Aguarongo los más cercanos.
Lastimosamente, estos días magníficos para la recreación en contacto con la naturaleza e incluso para hacer educación ambiental en familia y en comunidad, se ven empañados por la presencia de los incendios forestales que afectan nuestros escasos bosques y reservas verdes, las más de las veces, ubicados en las colinas que circunscriben el valle de Cuenca. En estos días es frecuente observar sitios de intensa humareda en las colinas aledañas y en las noches ver pequeños, medianos y grandes nidos de fuego que crecen y se expanden. Flagelos, las más de las veces, producidos por la indiferencia y falta de sensibilidad, por errores al querer realizar quemas controladas que se les va de las manos; a veces quemas producidas por motivos precisos, recuerdo a la campesina que decía, sin ningún rubor, que prendió fuego a sus pastizales “para que retoñe parejito”. A veces por pirómanos, lunáticos, que tampoco faltan.
Debemos hacer conciencia que los bosques, los cerros, las orillas y las colinas son espacios de gran biodiversidad y hábitat de una infinidad de pequeños seres vivos indefensos al fuego. De cuántas especies de ranas, libélulas, abejas, saltamontes, caracoles, y miles y miles de especies habitantes del micro mundo vegetal, del chaparro y de las praderas; incalculable número de gorriones, codornices, jilgueros, golondrinas, tugas y colibríes, brujillos, azulejos y mariposas y tantas y tantas especies aladas son sorprendidas en su nido, en su vuelo o en su canto. Hacer conciencia de que tantos pequeños y medianos habitantes del bosque, de la tierra y del cielo son atrapados por el fuego de los incendios forestales. (O)