La celebración del Dia de Difuntos, es tan arraigada en nuestros países hispanoamericanos, responde a nuestras raíces indígenas y a las culturas autóctonas de Mesoamérica. Lograda la conquista de las tierras del nuevo continente, por los Reyes Fernando e Isabel, la tradición indígena se funde con las creencias de la Religión Católica, dando lugar a la festividad del Día de los Difuntos, que pone de manifiesto el culto a los muertos, tan enraizada en las culturas prehispánicas.
Desde la tradición indígena, las ánimas registran una vuelta a la vida de los humanos, a convivir con los familiares y compartir los alimentos que se les ofrecen. Variados rituales se desarrollan en el Día de Difuntos y, particularmente en México, tradición reconocida por propios y extraños. Se genera un enorme sincretismo entre vida y Muerte y se busca con fruición el color morado o negro, hasta que, también en la comida se evidencia esta búsqueda; en nuestro país con la preparación de la colada morada y las tradicionales guaguas de pan. ¡Cada vez más, destacada y aprovechada por quienes gozan de las tradiciones y en el goce de la cultura indígena! (O)