Acaba de concluir en los Emiratos Árabes Unidos la Conferencia Anual de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, la que fue conocida también como “La Conferencia de las Partes”. En dicho evento, por primera vez en la historia se hace realmente un llamado a abandonar los combustibles fósiles en todos los sistemas energéticos, a pesar de que los Emiratos era un país miembro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo; esto quiere decir que los países grandes comienzan a frenar su consumo de carbón, petróleo y sus derivados.
A pesar de la decisión de reducir los combustibles fósiles en la convención, se refiere a que se podría dejar de utilizarlos, pero no se obliga a los países diciendo que “debe” reducirse. En consecuencia, no es una medida fuerte, obligatoria, sino más bien que abre un camino a la historia, la que se apresta a subir más de dos grados centígrados sobre los niveles de temperatura actual. En este año que concluye, se considera que el 2023 ha sido el más caliente de la historia y que la humanidad debería preocuparse para frenarlo, porque lo que acontece en el mundo ya es crítico.
Otro logro conseguido en la COP 28 que acaba de concluir en los Emiratos, fue la constitución de un fondo para pérdidas y daños, pero el que fue realmente muy pobre, puesto que los países que sufrimos daños y que estamos en desarrollo, experimentamos mayores agresiones ambientales. Es necesario aumentar el fondo verde para el clima, para que puedan palear todos los daños de carácter ambiental; esperemos que los países más ricos tales como los Estados Unidos, puedan aprobar los recursos que se requieren para este tema. La sequía, las inundaciones y las migraciones hoy impactan muy fuerte. (O)