Rafael Nadal, eliminado del torneo de Brisbane al caer en los cuartos de final ante el australiano Jordan Thompson y que tuvo que ser atendido de molestias físicas, comentó tras el encuentro, de más de tres horas de duración, que el dolor que sintió fue «en una zona similar a la del año pasado».
«El dolor fue en una zona parecida a la que me operé el año pasado pero diferente. Como más muscular. El pasado año fue el tendón y esto es más como un músculo cansado. No es lo mismo del año pasado porque lo noté al momento y esta vez no noté eso», explicó Nadal.
«El único problema es que es en una zona similar y eso me hace estar más preocupado de lo normal. Lo mejor que podía pasar es que el músculo esté supercargado por el esfuerzo de estos tres días y de un partido tan duro como este. Eso sería lo ideal, pero no se sabe aún», añadió.
«Ahora mismo es muy pronto para poder decir nada. No es un día para hablar más de la cuenta de eso. Solo espero que sea una sobrecarga grande y que en los próximos días pueda seguir entrenando. Si no es así, ya será el momento de hacer más pruebas. Si se queda en eso, en una sobrecarga, pues habrá sido una semana muy positiva. Si no, no lo habrá sido tanto».
«Tengo que ver cómo me levanto mañana. He sido precavido estos días porque después de un año sin jugar es difícil jugar torneos al máximo nivel y nunca sabes cómo va a reaccionar el cuerpo», añadió.
«Tengo que aceptar las cosas como vienen«, agregó, «y espero que no sea nada importante y tener la oportunidad de entrenar la semana que viene y jugar en Melbourne. Pero ahora mismo no estoy seguro al cien por cien».