Teresa Sanmartín Morocho es una de las pocas jóvenes de la parroquia Cochapata, del cantón Nabón, que alcanzó un título universitario para retribuir sus conocimientos a los niños de su localidad. Lo hace a través de un proyecto social de la Prefectura del Azuay con respaldo del gobierno parroquial.
En Cochapata como en el resto de comunidades de Nabón existen altos índices migratorios debido a la falta de oportunidades de trabajo.
La mayoría de adolescentes ven la migración hacia las ciudades grandes del país y a los Estados Unidos (EE.UU.) como la principal alternativa para salir adelante por el bienestar de sus familias porque la agricultura y ganadería no recompensan el esfuerzo.
Teresa, quien tiene 25 años de edad, se siente privilegiada de haber terminado la escuela, el colegio y de ingresar a la Universidad Politécnica Salesiana (UPS) para lograr la licenciatura en Pedagogía de la Actividad Física y Deportiva.
Su triunfo lo debe a sus padres, quienes priorizaron el futuro de su hija ante cualquier otra situación pese a las adversidades.
Aunque lamenta que muchos de sus compañeros que tenían sus mismos sueños no corrieron con la misma suerte. La situación económica trunco sus aspiraciones por los costos que representaba salir de la parroquia para estudiar sea en la universidad público o en las privadas de Cuenca.
Confían en sus conocimientos
Las autoridades parroquiales y de la Prefectura confiaron en ella para que se haga cargo de una de las actividades del proyecto “Caravanas por la vida” porque conoce la realidad de la zona.
Lleva alrededor de dos meses al frente de un espacio dedicado al control de tareas que se proyecta como una especie de aula pedagógica para reforzar lo que aprenden en las escuelas los infantes.
Trabaja inicialmente con 10 niños de edades comprendidas entre los 5 y 10 años de edad que provienen del centro y zonas aledañas de Cochapata. La intención es que se sumen más niños, especialmente de las comunidades distantes donde la pobreza y los niveles de desigualdad se agravan.
En su trabajo da énfasis, principalmente a la escritura y lectura que son una de las falencias que se evidencian en la zona. Esto porque muchos padres apenas terminaron la escuela para dedicarse a trabajar o migraron por lo que dejaron a sus hijos con sus abuelos que no tienen la preparación para guiarlos de forma adecuada.
Asegura que en los rostros de los pequeños ve las ilusiones que ella tenía para aprender, superarse y ser el orgullo de sus padres.
El anhelo que tiene es crear una propia escuela en su localidad para a más de ayudar a la tareas, se convierta en una área deportiva de aprendizaje de diferentes disciplinas como el complemento perfecto. (BPR)-(I)
Actividades planificadas en proyecto
En el proyecto “Caravanas por la vida”, de la Prefectura del Azuay que se lleva adelante con municipios y juntas parroquiales de la provincia, se realizan diferentes acciones. Este proyecto está liderado por la Dirección de Género y Equidad.
Con la Junta Parroquial de Cochapata, del cantón Nabón, constan en un convenio suscrito varias actividades -por citar- talleres de promoción de derechos, atención domiciliaria en diferentes servicios incluso espacios para las denuncias en caso de maltratos.
También está el acompañamiento escolar y de tareas para los niveles de básica elemental, entre otras labores importantes. (I)
DETALLES
- 10 niños son parte en un inicio del espacio de control de tareas y reforzamiento de los conocimientos.
- La atención se realiza de martes a viernes por la tarde. Una primera etapa se efectuará por cinco meses, de los cuales, han transcurrido dos.
- Cochapata es una de las tres parroquias rurales del cantón Nabón. Los ingresos económicos se generan de la migración y labor en el campo.