Los ecuatorianos no olvidaremos el fatídico 9 de enero del año en curso, cuando grupos armados narcodelictivos amenazaron iniciar una verdadera “guerra”, llevando al Señor Presidente Daniel Noboa a declarar: estado de conflicto armado interno y autorizar operaciones militares. Entre los acontecimientos más alarmantes recordamos el secuestro de periodistas de TC Televisión en Guayaquil, varios hospitales en Guayaquil, fueron atacados, asesinados en el Centro Comercial Albán Borja. Simultáneamente, en Quito se evacuaron edificios estatales y se desactivó un explosivo cerca del Obelisco de la Vicentina.
Este escenario de inseguridad y terror se extendió por todo el país, ordenando las autoridades el cierre de todo el sistema educativo, bancos, mercados y tiendas a nivel nacional para proteger a educandos, comerciantes y clientes. El miedo y pánico fue generalizado, en las 24 provincias, debiendo confinarnos en nuestros hogares.
Las acciones ejecutadas por nuestro Presidente, el más joven en la historia del Ecuador, desde el 23 de noviembre del 2023, en tan solo tres meses de funciones, desplegando al Ejército y Policía en las calles, liberando las cárceles del crimen organizado, la planificación de nuevas mega cárceles de máxima seguridad, decenas de operativos para desmantelar bandas delincuenciales, reciben el apoyo generalizado de la población ecuatoriana, la solidaridad y apoyo internacional.
Es destacable este accionar pues el Ecuador estuvo a punto de convertirse en un narcoestado, con las mafias infiltradas en todos los estamentos públicos y en los partidos políticos. Este momento no hay otro camino que entregar nuestro aporte económico, con el pago de un mayor valor del IVA, pues los recursos económicos son esenciales para sostener este inmenso y traumático conflicto armado interno. ¡Nada es más importante que la paz y el bienestar ciudadano!
Sin embargo, el país espera también el pronto inicio de grandes acciones para mejorar la salud, la educación, la vialidad abandonada irresponsablemente y la generación de fuentes de trabajo tan necesarias para alcanzar la paz y el bienestar de todos. (O)