El Bosque de Monay II que, hace unos años era uno de los sectores lejanos del casco urbano de Cuenca, hoy es un barrio de emprendedores y con proyectos innovadores.
Se fundó en la década de los 80 en una zona privilegiada de las proximidades del río Cuenca que resulta de la unión del Tomebamba y Yanuncay. Ocupa una especie de cuadrante que se divide en bloques para separar las viviendas.
Barrio limita con autopista y río Cuenca
Limita por el norte con el barrio del Bosque de Monay I; y al sur con la ciudadela Tomebamba. Mientras, al este con la vía rápida Cuenca-Azogues-Biblián conocida también como la autopista; y, al oeste con la avenida 24 de Mayo.
Existen barberías, restaurantes, panaderías, talleres y hasta estudios de diseño que se sitúan en la planta baja de las casas. Inclusive, se emplaza el Seminario Mayor de la Arquidiócesis de Cuenca para que se impartan conocimientos a los futuros sacerdotes de la provincia del Azuay y el país.
Para Robinson Oleas, propietario de un estudio de diseño gráfico, le resulta placentero trabajar en su barrio, servir a sus vecinos y compartir las experiencias de su oficio que le llenan de satisfacción por los logros alcanzados.
Algo similar opina Patricio Pauta, quien es el dueño de una tienda y abrirá en los próximos días un taller de repuestos de motos tras haber tenido este negocio en el centro de la ciudad.
Pauta espera que la unidad entre vecinos persista hasta habla de organizar eventos como campeonatos y otras actividades por ese fin.
Huertos con abono de residuos orgánicos
Entre los proyectos innovadores se impulsa desde hace dos meses un programa con el Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica (MAATE) para usar los residuos orgánicos en la elaboración de abono. Los vecinos quieren con esto impulsar la creación de huertos urbanos para aprovechar de algunos espacios de sus hogares.
Cristina Narváez, técnica del MAATE, resalta la predisposición de los moradores para intervenir en los talleres previo a la siembra que tendrá lugar en los próximos días de plántulas de: cebollín, lechuga, rábano, entre otros productos.
Fanny García, moradora del sector, se muestra como una de las vecinas más entusiastas con este programa para aplicarlo con su esposo en su casa porque les gusta incursionar en la producción agrícola.
La directiva del barrio aspira que más vecinos se sumen a esta iniciativa que el Ministerio impulsa en Cuenca y el cantón Paute.
La casa comunal se ha convertido en el centro de producción para este y otros proyectos. El afán es que el barrio sea un referente para otros sectores del cantón. -(I)
Problemas en movilidad e inseguridad
Los vecinos del Bosque de Monay II sufren también de necesidades en su ímpetu por salir adelante.
Los problemas de movilidad por la falta de un semáforo, rompevelocidades y señalización horizontal en las calles OEA y La Paz afectan su tranquilidad.
Félix Solano, presidente del barrio, solicita a las autoridades municipales que escuchen estos pedidos, así como otros en seguridad e infraestructura.
Solano se refirió a la necesidad de implementar una cámara de videovigilancia en el paso desnivel para peatones que se ubica en el tramo de la autopista que atraviesa por su sector.
Esta estructura es utilizada por jóvenes y personas sospechosas para consumir bebidas alcohólicas.
Igualmente, pide que se realicen obras para terminar el cerramiento que cubre la casa comunal porque hay indigentes que se están apoderando de los exteriores. (I)
DETALLES
2 áreas recreativas tiene el barrio. Se trata de los parques del Seminario y Antártico para el disfrute de las familias.
Según Félix Solano, alrededor de 600 familias que suman más de 2.000 personas residen en el sector.
En el Seminario Mayor de Monay se celebran todos los días eucaristías. Además, funciona la Casa de la Juventud y el Banco de Alimentos de la Arquidiócesis.
Más noticias relacionadas:
Barrio Corazón de Jesús pide reubicación de la feria de ganado