Belén es una hermosa pequeña localidad Palestina en Cisjordania, situada a 9 km al sur de Jerusalén, enclavada en los montes de Judea, a 775 metros de altura, siendo uno de los lugares de peregrinación más importantes del mundo, tanto para la religión cristiana como para la musulmana y judía. Lugar sagrado en el cual se venera la tumba de Raquel esposa del patriarca Jacob, localidad de nacimiento y de coronación de David, Rey de Israel.
La basílica de la natividad en Belén, es uno de los santuarios cristianos más antiguos, construida sobre la cueva conocida como portal de Belén, lugar donde nació Jesús de Nazaret. La primera edificación data del siglo IV DC, por orden del emperador Romano Constantino I.
El ingreso a la basílica se hace por una puerta pequeña que obliga a pasar de uno en uno, y aun así con dificultad. Quien desea entrar en este lugar sagrado del nacimiento de Cristo, tiene que inclinarse, hacer reverencia. En eso se manifiesta una cercanía con la noche santa: si queremos encontrar al Dios que ha aparecido como niño en Belén, hemos de apearnos del caballo de nuestra razón, de nuestro orgullo, deponer falsas certezas y soberbia intelectual, que nos impide percibir la proximidad y grandeza del Salvador.
En la actualidad la navidad se vive con demasiado ruido y consumismo: comercio, fiestas, regalos, perdiendo así, la perspectiva del verdadero sentido espiritual de esta celebración que es la de unión, solidaridad, el compartir con los que menos tienen, el renacer en Jesús en cada corazón.
Que en estos días podamos ver el verdadero significado del nacimiento del Salvador y sintamos gratitud sincera por su vida, sus enseñanzas y su sacrificio de salvación por nosotros. Que esa gratitud nos haga renovar nuestra determinación de seguirle, que nos acerque más a nuestras familias, a nuestra Iglesia, a nuestro prójimo.
Es el período apropiado para reexaminar nuestra vida y evaluar nuestros sentimientos y acciones. Dejemos que sea un tiempo de gratitud, un tiempo de perdón y reconciliación.
¡Felices pascuas de Navidad estimado amigo lector! (O)