En estas fechas propicias para reuniones familiares, de amigos, vecinos con parabienes navideños. Ante la inminencia de un proceso electoral se dialoga del país, desde una compleja realidad mediada por la criminalidad en su auge con indicios de contagio institucional, desempleo y sus secuelas económicas con servicios públicos ineficientes, que deben mejorarse aun con las disponibilidades existentes. Mostrando como ejemplo lo que nos pasa en el servicio eléctrico, abandonado desde hace 10 años, que nos afecta ante la sequía recurrente, que ha llevado a una acción de recuperación urgente del parque termo eléctrico, contratación de energía a Colombia, de barcazas, etc. Ayudados por lluvias en estas últimas semanas.
De la inseguridad no salimos solos, es la premisa indefectible, que requiere una comprensión del electorado para confiar en personas idóneas para enrumbar a la patria; sostener a la juventud en nuestro territorio ante la diáspora al exterior por no encontrar oportunidades ante sus expectativas, que es el síntoma mayor de la debacle nacional, haciendo accesible su incorporación al trabajo honesto, mantenemos sus capacidades al servicio propio que redunda en el progreso nacional. Reingeniería de instituciones de seguridad: policías, militares, guías penitenciarios, agentes de tránsito, etc. Si en verdad pretendemos sanear a los focos de corrupción presentes. Como muestra se suspenden los operativos de tránsito, para alivio de la gente, ante las denuncias de miles de usuarios por sus dudosas actuaciones en las vías.
Se requiere potenciar el servicio público de salud, abandonado, que mostro debilidades inherentes en la pandemia, con negociados. Alarma oír al primer mandatario que supone equipos deteriorados a propósito en hospitales, para propiciar la referencia al servicio privado, que requiere un control estricto del tiempo de uso y buen uso de los equipos médicos de diagnóstico y tratamiento, haciendo urgente auditorias de su vida útil. Hay mucho por hacer y esperamos que el nuevo año sea de ejecutorias concretas en estos y otros aspectos, que devuelvan la esperanza de avanzar a mejores días. Feliz 2025 (O)
