Es la realidad cruda y cierta, no ciencia ficción ni tema para película o miniserie, lo que está ocurriendo con el flagelo más espantoso creado por la humanidad, la droga y el narcotráfico en sus variados aspectos, desde el cultivo , pasando por el refinamiento y luego la distribución camuflada y subrepticia a todo el mundo, con sus respectivos locales de almacenamiento distribución e importación, como cualquier producto, con la única diferencia que el valor de una rama de coca, vale miles al lado de un mismo brote de lechuga.
Es increíble la ganancia que obtienen, que, por ello, están maridados gobiernos y delincuentes avezados, ignorantes, pero audaces, que apenas saben escribir como lo demuestra la carta del célebre Fito, dirigida a las autoridades colombianas para que sirvan de mediadores con el Ecuador para negociar su libertad, ante el terror de ser extraditado a los EEUU.
Quiero pensar que existe una casualidad, que Petro con su mirada divagante visito Ecuador, donde la presidenta de Perú no le dio ni la mano, viajó en silencio total, sin que nadie lo sepa a Manta, donde tres días pasaron sin reportarse. ¿Playero? Pues no, nunca estuvo en la playa bronceando su piel, que se sepa, entonces no parece ser casualidad y no nos consideren ilusos por sospechar certeramente que Fito habló con él personalmente, para ponerse de acuerdo en su entrega a la justicia y el futuro del narco negocio internacional y mundial.
No es fácil salir de este atolladero monstruoso del narco que mueve millones de dólares en su desarrollo y hegemonía, cuyo terreno fue allanado por `el delincuente belga’ y su ayuda en todo sentido, recibiendo esta gente en Carondelet y tomándose fotos para el recuerdo, quitando lugares de control como la base de Manta, liberando ciertas cantidades de droga, aceptando migrantes de clase dudosa con la cantaleta de la nacionalidad universal y otras cositas aparte de enriquecimiento de la pandilla verde, la mayoría prófugos.
Esto es cierto, no lo decimos nosotros. Es la realidad contada sencillamente. (O)