
La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, anunció que su gobierno considera imponer aranceles a países con los que México no tiene tratado comercial, entre ellos China.
El planteamiento ocurre en medio de las presiones comerciales del presidente estadounidense, Donald Trump, quien ha amenazado con gravar todas las exportaciones de México e impuso derechos aduaneros que afectan a las industrias automotriz y siderúrgica de su vecino.
«Estamos considerando poner (…) algunos impuestos arancelarios con los países con los que no tenemos tratado comercial, entre ellos también se encuentra China, pero no es el único», declaró la mandataria durante su habitual rueda de prensa matutina.
La anterior semana, al concluir una investigación antidumping, la Secretaría de Economía de México estableció cuotas compensatorias a las importaciones de calzado originarias de China que ingresen por debajo de 22,58 dólares por par.
Esta medida se suma a la eliminación de un régimen temporal que permitía la importación libre de impuestos de calzado terminado y a los aranceles fijados en diciembre a una serie de insumos textiles.
A comienzos de este año, Sheinbaum lanzó una estrategia para sustituir importaciones, principalmente aquellas provenientes de Asia, llamada Plan México.
Desde su regreso a la Casa Blanca, Trump ha amenazado con gravar las exportaciones de Canadá y México, sus socios en el tratado comercial de América del Norte (T-MEC), como medida de apremio para que ambos países redoblen sus esfuerzos para controlar el tráfico de drogas y la migración irregular a través de sus fronteras con Estados Unidos. (I)