Los ecuatorianos/as, estamos ante una consulta popular para resolver temas sustanciales que inciden en la convivencia social. El público debe asumir su responsabilidad como una oportunidad para organizar al estado al servicio ciudadano, para un modelo de educación y salud con accesibilidad a la población de manera equitativa. La seguridad recuperada para los individuos, familias y comunidades, ahora estropeada y con abandono de poblaciones enteras cuyos territorios han sido tomados por grupos violentos que responden al narcotráfico, minería ilegal, corrupción enquistada entre lo público y privado y una justicia cercada por la influencia criminal, que la atemorizado. Eso sería de cambiar con la fuerza del voto popular.
Definiremos si se permite la cooperación internacional en el territorio, la adjudicación de fondos públicos a los partidos nacionales y disminución del número de representantes a la asamblea nacional, siendo a mi entender la de más trascendencia, la instalación de una nueva asamblea constituyente, para adecuar el marco jurídico a las nuevas realidades sociales, económicas, culturales y políticas, que requiere el país en otro escenario que permita un sostenido progreso.
Lo más importante es que el soberano tomara la definición del rumbo nacional, en las urnas, y cualquiera fuera el resultado hay que entender su mensaje a los gobernantes y gobernados, para que sigan dicho mandato, sin dilación. Buscando nuevos rumbos en los dos casos, aunque parezca paradójico. Lo cierto es que luego de la elección la situación del ecuador sigue con los mismos problemas que corresponde atender a las autoridades en todos los niveles e interactuar entre ellos, para la atención ciudadana. Como el de inseguridad que ahora da indicios de alarma en Cuenca, que, siendo responsabilidad del estado central, se debe actuar en todos los niveles, por cuanto no se cataloga de buena gestión, autoridad alguna local, cuando el temor paraliza a la gente, ante la inminencia de un asalto, secuestro o sicariato. Votemos con conciencia nacional y no a favor o en contra de quien convoca la consulta. La patria es de todos/as y debemos defenderla. (O)






