Cuatro de cada 10 personas han experimentado al menos una situación de acoso sexual en el ámbito universitario, afectando su salud mental, rendimiento académico y, en muchos casos, sus proyectos de vida. Así lo reveló una investigación de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE), que profundiza en los efectos del acoso en la vida de las víctimas.
La PUCE realizó un estudio con 800 estudiantes, docentes y personal administrativo, encontrando que ocho de cada diez víctimas son mujeres. Esto evidencia que las mujeres y las diversidades de género siguen siendo los grupos más vulnerables, en línea con los patrones de desigualdad estructural.
Impacto emocional del acoso sexual
El estudio enfatiza la devastación emocional que el acoso sexual provoca en la vida y el cuerpo de las víctimas, afectando sus rutinas, decisiones y relaciones.
Graciela Ramírez, docente de psicología e investigadora principal, comenta:
“Aunque muchas veces se ha normalizado la violencia, las víctimas nunca exageraron. No siempre encontraron palabras para expresarse solas; a veces hablan juntas a través de los datos”.
Hallazgos principales del estudio

Entre las consecuencias académicas y laborales consta que el 92 % siente miedo de volver a
las universidades. / Cortesía
Entre los hallazgos destacados se incluyen:
- Prevalencia: el 44 % de los encuestados ha sufrido acoso sexual, siendo las mujeres y personas de otros géneros las más vulnerables.
- Dinámicas de poder: el 79 % de las víctimas eran estudiantes, lo que evidencia las relaciones de poder en las estructuras jerárquicas universitarias.
- Impacto en la salud mental: más de la mitad reporta dificultades de concentración, ansiedad y síntomas depresivos.
- Consecuencias académicas y laborales: el 92 % siente miedo de volver a la universidad, el 49 % cometió errores por preocupación y el 34 % recibió amonestaciones, afectando su desempeño y proyección futura.
- Baja búsqueda de apoyo psicológico: solo el 40 % de las víctimas busca ayuda profesional.
Necesidad de protocolos y prevención
En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, celebrado el 25 de noviembre, la investigación resalta la necesidad de que las instituciones de educación superior implementen:
- Protocolos sólidos contra el acoso sexual
- Rutas de acompañamiento integrales
- Acciones de prevención permanentes
La universidad invita a reflexionar sobre la importancia de construir una comunidad universitaria respetuosa, inclusiva y libre de violencia. Solo con compromiso colectivo y acciones concretas es posible reducir y prevenir el impacto del acoso en la vida de las víctimas. (I)











