China y Japón son los países donde más se respeta a las personas mayores. En Japón se celebra el Keirō No Hi: Día del Respeto a los Ancianos, una festividad muy importante en la que participa toda la familia. Los ancianos japoneses son reconocidos como pilar de la sociedad. En China también existe un profundo respeto y veneración por ellos, el gobierno promulga leyes que obligan su cuidado prioritario.
Por el contrario la sociedad occidental del siglo XXI tiende a emplear expresiones peyorativas para referirse a las personas mayores. Viejo se ha convertido en sinónimo de inútil, feo, antiguo ó incapaz.
La pandemia del coronavirus que tan rápidamente se está expandiendo afecta duramente a los ancianos. Datos obtenidos del brote inicial en China muestran que el 83% de quienes sucumbieron ante la infección de Covid-19 tenían más de 60 años.
¡Todo los días debemos decidir a quién salvar. Los que son más viejos y con más problemas quedan afuera esperando la muerte porque para la terapia intensiva se seleccionan a los que pueden curarse y vivir más tiempo! Conmovedora pero cuestionable expresión del Dr. Christian Salaroli del Hospital Juan XIII de Bérgamo-Italia.
Estamos ignorando las enseñanzas de las Sagradas Escrituras: «Ponte en pie ante las canas y honra a tu Dios». «Honra a tu padre y a tu madre». Una exhortación delicadísima en favor de los padres, especialmente en la edad senil dice: «Quién desampara a su padre es un blasfemo, un maldito del Señor quien maltrata a su madre».
«La «riqueza de los años» es la riqueza de la gente, de cada persona que tiene muchos años de vida, experiencia e historia a sus espaldas. Es el precioso tesoro que toma forma en el camino de la vida de cada hombre y mujer. Porque la vida es un regalo, y cuando es larga es un privilegio, para uno mismo y para los demás». Nos enseña el sabio Papa Francisco. (O)