¡Cuanta gente que detesta la tecnología virtual y se pasa hablando mal de ella ha usado y aprovechado de sus ventajas y virtudes en estos largos días de la cuarentena (aislamiento por un período indefinido, significado actual), para comunicarse con amigos, familia, alumnos, relaciones sociales, comerciales y aun religiosas! Ironías de la vida, del tiempo, de la pandemia espantosa.
He visto y oído un variado repertorio: cosas serias, reflexiones, saberes compartidos, frivolidades, cursilerías, de todo.
Participé en varias de estas plataformas, una de la CCE, el día del libro, en que representantes de la política y la cultura local leyeron LA PESTE de Camus; otra, muy agradable y pequeñita en Saladentro: discusión sobre el encierro y sus derivaciones; 4 con colegios: La Inmaculada de Loja, Becher Stowe y Gutemberg de Quito y La Salle de Cuenca; una, pública, de Editorial Don Bosco, extensa y rica, sobre la narrativa actual del Ecuador; un enorme festival, la Semana del Libro y la Esperanza, que duró varios días, en que participamos algunos autores publicados por EDINUN, y los editores, en distintas actividades, entre ellas, un panel moderado por Juana Neira Malo -periodista y autora-, y en el que estábamos: Francisco Delgado Santos, Armando José Sequera, el venezolano eximio de la literatura infantojuvenil, este servidor, y 700 asistentes entre docentes y educandos. El tema, muy hermoso: Cómo siembra esperanza la literatura.
La Biblioteca Municipal de Cuenca organizó un foro sobre la novela LOS HIJOS, de Alfonso Cuesta, la más bella que se haya escrito sobre Cuenca.
Durante los tres últimos días de mayo, se desarrolló el XIV Maratón del Cuento, organizado por Girándula. Libresa, Don Bosco, Edinun, Salazar Editores y otras empresas y entidades colaboraron con vídeos en que los autores leímos nuestra producción, especialmente para los niños. Fue una bella experiencia ofrecerles unos cuentos y unos poemas, que al ser subidos a las redes sociales, posterior a la actividad central, que fue totalmente no presencial, han sido acogidos cálidamente.
En suma, la tecnología virtual y audiovisual nos ha acompañado en esta dura época, permitiéndonos mantener una cierta cercanía. en medio del prudente distanciamiento.