El Movimiento Compromiso Social por la Revolución Ciudadana (RC), que lidera el expresidente ecuatoriano Rafael Correa, advirtió este lunes sobre el intento de proscribirlo para los comicios del próximo año y de un supuesto «fraude electoral» para perjudicarle.
La presidenta de dicho grupo, Vanessa Freire, rechazó este lunes la amenaza del contralor del Estado, Pablo Celi, quien amenazó con la destitución de varios integrantes del Consejo Nacional Electoral (CNE), sino se eliminaba a RC del registro para los comicios del próximo año.
Freire, en una rueda de prensa, anunció que presentó este lunes un pedido al Tribunal Contencioso Electoral (TCE, organismo de control legal de los comicios) para que se analice la destitución del contralor, por intromisión en el proceso de comicios.
Recordó que en tiempos electorales, son las autoridades de esa función del Estado las que tienen la prerrogativa sobre decisiones en ese ámbito, por lo que la amenaza del contralor atenta contra la organización de los comicios.
Según ella, existirían «pretensiones antidemocráticas» detrás de la actuación de Celi y su afán de proscribir al movimiento que lidera Correa, el expresidente progresista de Ecuador que reside en Bélgica y que fue sentenciado a ocho años en un caso de corrupción, que él niega.
Para Freire, Ecuador vive actualmente «momentos muy oscuros» y está en peligro la propia democracia, con acciones como las del contralor, que pretende impedir el pleno ejercicio electoral.
El contralor Celi, en un documento enviado al Consejo Nacional Electoral (CNE), pidió dejar sin efecto las inscripciones de los movimientos políticos «Podemos», «Compromiso Social», «Libertad es Pueblo» y «Justicia Social».
El CNE no dio paso a esa solicitud, por lo que Celi, en otro escrito enviado este lunes, hizo conocer su decisión de destituir e imponer una multa a los consejeros electorales que se opusieron a su requerimiento.
Entre ellos a Diana Atamaint, la presidenta del CNE, y a los vocales José Cabrera y Esthela Acero, quienes forman el grupo de mayoría en el Consejo Electoral.
Dirigentes del movimiento RC no han dudado en responsabilizar de las acciones contra su grupo al actual Gobierno del presidente Lenín Moreno, convertido en el más acérrimo rival político de Correa, su antecesor y antiguo correligionario.
«Realizaremos todas las acciones legales, nacionales e internacionales, para evitar que se rompa con la ya débil institucionalidad existente» en el país, dijo por su parte la dirigente del movimiento y prefecta de la provincia de Pichincha, Paola Pabón.
Asimismo, Pabón dijo que le pidió la intervención de organismos internacionales como la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Unión Europea (UE), ante lo que calificó de «claro intento de fraude electoral, mediante la proscripción» de su grupo partidista.
La pretensión de destituir y multar a los integrantes del CNE, en pleno periodo electoral, es «un golpe a la democracia en Ecuador, añadió la prefecta de Pichincha (provincia cuya capital es Quito).
Asimismo, no descartó que Rafael Correa pueda ser candidato de su movimiento, aunque remarcó que su grupo tiene «derecho a participar en la contienda electoral del 2021, independientemente del candidato» que se presente.
Según ella, «el correísmo tiene alta intención de voto pero, sobretodo, tiene voto duro del 36 por ciento», agregó al precisar que entre las opciones electorales de su grupo no se excluye la conformación de un gran frente político del progresismo.
«Insistiremos en participar con nuestro movimiento, Compromiso Social por la Revolución Ciudadana, ya que otra manera sería aceptar las arbitrariedades e ilegalidades del proceso», concluyó Pabón.